Regalo

Me quiero y me odio, me alabo y me insulto, me aprecio y me desprecio, me gusto y me disgusto, me deseo y me rechazo, vivo y me muero, y soy un egocéntrico emocionalmente inestable.
¿Quién quiere mi alma?

{update} Reedito porque mientras llevaba a Toña en el coche a su trabajo, hemos visto en menos de quinietos metros tres coches averiados en el mismo carril. Y cuando venía andando hacia el despacho, ha estado, real y literalmente, a punto de atropellarme un taxista en un paso de cebra, con salto inimaginable mío y frenazo arrastrando ruedas del taxista. ¿Serán premoniciones?{/update}