El nuevo año se inicia, como siempre, con el rito de los regalos. Este año, bueno, lo que se dice "buenovaticano" no he sido, ni este ni ninguno, pero pese a ello, como SS.MM. si lo son, se que mañana tendré algunas de esas cosas que tanto me apetecían. Pero hay algo que se me olvidó incluir en mi carta y que, como se que con esto de internet mi mensaje va a llegar a los Reyes que deben andar ya por esos caminos de Dios, les pido ahora: GANAS. Necesito una buena dosis de ganas e ilusiones renovadas para este 2004 que se nos ha echado encima casi por asalto, sin darnos cuenta.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario