He parado, he pisado el freno a fondo, y ahora José Luis Perales me persigue sin cesar, esté donde esté, cantándome al oido, "no se si recuerda Ud. al hijo de D. Ramón, tan listo que parecía y se ha convertido en pastor", ¿se puede dar marcha atrás?
Publicar un comentario
No hay comentarios:
Publicar un comentario